FILOSOFÍA – 4º DE ESO
UNIDAD 3. El conocimiento
- La teoría del conocimiento
- Las fuentes del conocimiento
- Las verdades de la razón (texto de Fernando Savater)
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS usadas para la confección de estas páginas (con añadidos y modificaciones con un fin exclusivamente educativo):
- Texto principal: Adela Cortina Orts, Emilio Martínez Navarro, Norberto Smilg Vidal, Filosofía, 4º de ESO, Serie Reflexiona, Santillana, Madrid, 2016
- Otros textos: José Manuel Tarrío, Filosofía, 1º de Bachillerato, Editex, Madrid, 2015 (pp. 22-23).
APRENDIENDO A FILOSOFAR: En clase vamos a formularnos una pregunta filosófica que nos conmueva. Vamos a investigar nuestra respuesta y la vamos a comunicar en clase.

ACTIVIDADES INICIALES (para realizar en el cuaderno/portafolio y comentar en clase):
1) ¿Qué significa “saber algo”?
2) ¿Cómo podemos saber si algo es verdadero?
3) Dado que cuando soñamos generalmente sentimos que lo que sucede en el sueño está ocurriendo de verdad, ¿cómo distingues si lo que haces en este momento es un sueño o es realidad?
4) ¿Podremos llegar los humanos a saberlo todo?
La teoría del conocimiento
Todos hemos sentido alguna vez la necesidad de saber algo con urgencia, ya fuera por curiosidad o por necesidad. En esos casos, lo que solemos hacer es plantear nuestras preguntas a los demás, o buscar la respuesta por nuestra cuenta. El deseo de saber solo se despierta en aquellas personas que toman conciencia de su propia ignorancia y se plantean preguntas. Todos los días nos hacemos preguntas, algunas sobre cuestiones aparentemente sencillas (por ejemplo: ¿qué hora es?) y otras sobre asuntos más complejos (como por ejemplo: ¿debería ayudar a mi mejor amiga a realizar una acción ilegal?). El deseo de saber está presente en el propio origen etimológico de la palabra filo-sofía (“amor por la sabiduría” o, lo que es casi lo mismo: deseo de saber, deseo de conocimiento). Parece que la tendencia a buscar el conocimiento se encuentra ya en nuestra naturaleza humana: “por naturaleza” deseamos saber, somos seres dotados de curiosidad.
La pregunta más universal y radical que los filósofos se plantean acerca del conocimiento es: ¿qué es conocer?, o en otras palabras: ¿en qué consiste el conocimiento? La respuesta a esta cuestión puede resumirse así:
a) Conocer es una acción o una actividad en la que están implicados dos elementos:
- El sujeto de la acción, que es todo aquel que conoce.
- El objeto de la acción, que es todo aquello que se quiere conocer.
(Por ejemplo, cuando una persona conoce una ciudad o un acontecimiento histórico, ese lugar y ese suceso son los objetos de conocimiento. Y ese conocimiento será tanto más objetivo cuando más fielmente se ajuste a dichos objetos).
b) Conocer significa que un sujeto se apropia intelectualmente del objeto. No se trata de una apropiación física o material, sino un acto de apropiación mental que se conoce con el nombre de aprehensión. Por ejemplo, cuando alguien conoce el cuadro de un pintor no se adueña de él, pero sí se lo apropia de manera intelectual, pues puede evocar mentalmente la imagen que está dibujada, así como los colores, la textura…
c) Esta apropiación del objeto no puede realizarse sin el lenguaje, esto es, sin conceptos o palabras. Todos los conocimientos han de poder ser expresados mediante el lenguaje. En términos generales, podemos decir que si no somos capaces de comunicar a otra persona que hemos realizado el conocimiento de algo, entonces no se ha realizado conocimiento alguno.
Existen dos términos en filosofía que se emplean para describir el estudio del conocimiento: gnoseología y epistemología:
- Gnoseología (de gnosis, conocimiento, y lógos, tratado o estudio): rama de la filosofía que tradicionalmente se ocupa del conocer. Una expresión que se suele usar como equivalente a gnoseología es teoría del conocimiento.
- Epistemología (de episteme, conocimiento demostrado, y lógos): se emplea este término para referirse al estudio de un tipo particular de conocimiento: el conocimiento científico. La epistemología, así, se encarga del conocimiento proporcionado por las ciencias, por lo que también se le llama filosofía de la ciencia. Estudia los diversos métodos de las ciencias (naturales, sociales y humanas), evaluando también sus resultados y las aplicaciones sociales que puedan tener.
A pesar de estas precisiones, muchos pensadores contemporáneos usan gnoseología y epistemología como sinónimos, ya que ambas se ocupan, en el fondo, de investigar sobre el origen, los fundamentos y el alcance de las facultades de conocimiento que poseemos los seres humanos
ACTIVIDADES DE COMPRENSIÓN (para realizar en el cuaderno/portafolio):
5) Según lo explicado en estos apuntes, ¿en qué consiste el conocimiento? ¿Cuáles son los elementos presentes en él?
6) ¿Qué es la aprehensión de un objeto?
7) ¿Es posible el conocimiento sin lenguaje? Razona tu respuesta.
Las fuentes del conocimiento
Hay una cuestión que desde los mismos comienzos de la historia de la filosofía ha sido planteada por los filósofos: ¿de dónde proviene nuestro conocimiento? Y otra: ¿de qué capacidades disponemos para conocer las cosas? Ya el filósofo Parménides, en el siglo VI a. de C. distinguió entre el conocimiento procedente de los sentidos o conocimiento sensible, y el procedente de la razón o conocimiento racional.
- El conocimiento sensible: la realidad se muestra a los sentidos de una determinada manera. Los sentidos nos muestran una gran diversidad de seres distintos (lo múltiple) e individuales (lo particular). También nos muestran la realidad como algo cambiante: ninguna de las cosas que captamos con los sentidos permanece idéntica de manera indefinida, pues se encuentra sometida al paso del tiempo. Por otro lado, a través de los sentidos es posible captar la apariencia de las cosas, es decir, el aspecto exterior de las mismas; sin embargo, los sentidos no parecen capaces de informarnos acerca de la esencia de las cosas, de lo que ellas verdaderamente son.
- El conocimiento racional: la razón, en cambio, nos proporciona una visión de la realidad distinta a la que nos proporciona la percepción sensible. Podemos caracterizar al conocimiento sensible de la siguiente manera:
a) Nos proporciona unidad y universalidad: la razón unifica los múltiples y plurales datos de los sentidos generando conceptos. La razón es capaz de elaborar una representación mental abstracta que corresponda al concepto “árbol” y que sirva para agrupar una serie de seres con hojas verdes y tronco leñoso. Se dice que cada concepto es universal, pues sirve para referirse a todos los ejemplares sensibles que cumplan determinadas características. El proceso por el cual la razón selecciona las características y cualidades comunes a todos los individuos de un mismo tipo se llama abstracción.
b) Los conceptos que construye la razón son inmutables, esto es, no cambian. Un árbol concreto nace y crece, pero la razón mantiene la misma representación mental abstracta: el concepto de árbol no nace ni crece.
c) La razón nos informa de la esencia de la cosa conocida, es decir, de lo que verdaderamente es el objeto de nuestro conocimiento, aquello que da respuesta a la pregunta: “¿qué es eso?”. Cuando una persona formula esa pregunta, pretende que le indiquen la esencia de la cosa, por ejemplo: “eso es un árbol”.
Pero, ¿qué es la razón? El filósofo griego Aristóteles definió al ser humano como animal racional; es decir, vino a decir que lo característico de las personas es que, siendo animales, estamos dotados de razón (en griego: lógos, palabra también traducible por “palabra” o “lenguaje”). Decir que el ser humano tiene lógos equivale a decir que es el animal que tiene lenguaje, el animal que usa palabras, el animal que habla. Así, nuestra capacidad racional está unida a la capacidad para usar el lenguaje. Los demás animales se comunican, esto es, disponen de señales para indicar a los de su misma especie cosas como “agua” o “no agua”, “peligro” o “no peligro”, etc. Pero, que sepamos, no son capaces de elaborar un lenguaje simbólico y articulado como el de los seres humanos.
La razón es la capacidad para usar el lenguaje en los distintos ámbitos de la existencia humana; y esto es, según muchos filósofos, precisamente lo que más diferencia a los humanos de otros animales. Gracias a la capacidad unificadora de la razón, que produce conceptos, podemos pensar y no solamente sentir o percibir, que es lo que permiten los sentidos. La razón nos permite mantener una relación intensa con el resto de seres racionales y cooperar socialmente para encontrar soluciones dialogadas a los problemas comunes; también la razón (el lenguaje) nos permite elaborar procesos de razonamiento personales que se producen en diálogo con nosotros mismos.
La razón, como capacidad humana específica, es inseparable del lenguaje. Exceptuando situaciones muy excepcionales (como, por ejemplo, las revelaciones místicas) no parece posible pensar sin palabras, sin lenguaje. Por ese motivo, el filósofo Platón afirmó que “el pensamiento es el diálogo silencioso del alma consigo misma”. Al pensar establecemos un diálogo con nosotros mismos, que es silencioso pues solo necesitamos que las palabras “resuenen” en nuestro interior.


ACTIVIDADES DE COMPRENSIÓN (para realizar en el cuaderno/portafolio):
8) Realiza un esquema en el que representes las características del conocimiento sensible y las del conocimiento racional.
9) ¿En qué consiste la abstracción en el conocimiento?
10) ¿Los sentidos nos engañan? ¿Vivimos en un mundo de apariencias? Muchos filósofos a lo largo de la historia han coincidido en afirmar que, en algunos aspectos, las personas vivimos en un mundo de falsas apariencias, de mentiras y falsedades consentidas y aceptadas por todos. Es común para la mayoría cerrar los ojos ante realidades que no nos gustan y rodearnos de comodidades para ocultar la verdad. Tapar los males del mundo con falsas apariencias no conduce a encontrar la verdad sobre nosotros mismos, sobre nuestra sociedad y nuestra época. Y aún menos conduce a solucionar aquello que causa problemas. Escribe un texto de al menos 250 palabras en el que reflexiones en torno a esta pregunta: ¿vivimos en un mundo de falsedad y mentiras?
11) “El show de Truman”
Vamos a ver una película americana muy interesante y de contenido filosófico titulada “El show de Truman”. Como seguro que ya sabéis, el ser humano posee una inclinación natural hacia el conocimiento, lo que se puede expresar también así: todos y todas, desde que nacemos, sentimos un irrefrenable deseo por conocer la verdad, por saber qué ocurre y cómo son las cosas verdaderamente. El caso de Truman (“hombre verdadero”, en inglés), el protagonista de esta película, es, en este sentido, especial: él no se plantea grandes preguntas existenciales, vive una vida cómoda y sin sobresaltos y, dado que no tiene gran capacidad de iniciativa, ni siquiera se ha planteado nunca abandonar la isla en la que vive para, por ejemplo, realizar un viaje y conocer otros sitios.
De repente, algo o, mejor, alguien, le hace cambiar: el detonante del cambio es Sylvia, una chica de la que se enamora y la cual le corresponde. Este hecho le hará replantearse toda su vida y comenzar a cuestionarse el porqué de todo lo que le rodea.
- Si no tienes la película en casa, puedes verla, para realizar esta tarea, pinchando en ESTE ENLACE.
- Tras ver la película responde a las siguientes cuestiones:
A) ¿Es verdad que solemos aceptar la realidad del mundo tal y como nos la presentan? ¿A ti también te pasa? ¿Por qué crees que es así?
B) Al igual que le pasa a Truman en la película, ¿crees que tiene que ocurrir algo especial (un enamoramiento, una situación dolorosa, etc.) en la vida para que nos planteemos el porqué de lo que nos rodea o el por qué de nuestra vida?
C) Piensa en la situación actual de confinamiento que estamos viviendo. ¿Crees que, siendo positivos, puede servirnos para replantearnos nuestro modo de vida y, de este modo, mejorar como individuos y como sociedad? Argumenta tu respuesta.
D) Truman ha sido manipulado desde su nacimiento, lo cual le exime, al menos en parte, de una responsabilidad inicial por su manera de vivir. Aplicando esto a nuestras vidas, ¿crees que la ignorancia nos quita en parte la responsabilidad por las cosas que podamos hacer mal? Argumenta tu respuesta.
E) Truman, al comienzo de la película, se nos muestra como una persona feliz. Sin embargo, su actitud se modifica cuando se lanza en busca de la verdad. La ignorancia, llevar una vida sin complicaciones, eludir las responsabilidades… ¿crees que nos conduce con más facilidad a la felicidad que las actitudes contrarias? ¿Por qué?
F) Uno de los mensajes finales de la película nos puede servir para reflexionar sobre el papel y el poder que, en nuestras sociedades, tienen los medios de comunicación de masas (televisión, internet…). Uno de los millones de seguidores de la serie, ante los acontecimientos finales de la historia, comenta a un compañero: “¿qué ponen ahora?”; es decir, algo así como: “¿qué seguimos viendo para entretenernos?”. Si profundizamos un poco en esta cuestión, podemos preguntarnos: ¿los grandes medios de comunicación (que incluyen también las plataformas de entretenimiento y de información) marcan nuestra manera de pensar, nuestros gustos, nuestras necesidades, nuestros intereses? Y, además, ¿acabamos considerando como “real” solo aquello que se recoge, de alguna manera, en los medios de comunicación? Trata de relacionar tu respuesta a estas preguntas con la situación actual de confinamiento por la pandemia que estamos viviendo.
Las verdades de la razón (texto de Fernando Savater)
Para concluir el tema sobre el conocimiento vamos a tratar de leer un texto del filósofo español Fernando Savater. El texto forma parte de su libro Las preguntas de la vida y constituye su segundo capítulo, de título “Las verdades de la razón”. Lee el texto despacio y responde las preguntas que te planteo a continuación. Tal vez este texto sea un poco difícil: no te preocupes, intenta entender lo que lees y si algún párrafo te parece demasiado complicado, sáltalo. Espero que disfrutes de leer este capítulo, ya que creo que Savater escribe muy bien.
Puedes descargar el texto en PDF pinchando aquí.

ACTIVIDADES DE COMPRENSIÓN (para realizar en el cuaderno/portafolio):
12) Preguntas acerca del texto “Las verdades de Razón”
A) ¿Has sentido alguna vez -como describe el autor en la página 48- la necesidad de encontrar la respuesta a mil preguntas? ¿En qué momentos de tu vida te ha ocurrido eso?
B) Las preguntas “¿cómo contestaré a las preguntas que la vida me sugiere?” o “¿cómo llegaré a saber lo que no sé?” (pp. 47-48) son tradicionalmente preguntas filosóficas. ¿Te has hecho alguna vez esas preguntas? ¿Recuerdas en qué momentos?
C) ¿De dónde, según el autor, nos viene todo aquello que creemos saber? (pp. 49-50). ¿Estás de acuerdo con el autor?
D) ¿Podemos, según el autor, estar seguros de tales conocimientos (es decir, de aquellas cosas que creemos saber)? (Páginas 50-51).
E) ¿A qué solemos llamar “utilizar la razón”? (Página 51).
F) ¿Cuál es la relación entre la razón y la verdad? (P. 53).
G) ¿Qué proponen los filósofos escépticos? ¿Y los relativistas? (Páginas 56 y siguientes).
H) ¿Crees que puede llegarse a la verdad sin utilizar la razón, por fe o por intuición, quizá por una corazonada? (Páginas 62-63).
J) ¿En qué supuesto se basa la democracia según el autor? (Páginas 65-66).
K) ¿Qué te ha gustado o te ha llamado más la atención de este texto? ¿Has disfrutado leyéndolo? ¿Has aprendido algo nuevo?